CREATURA O LA ESPERANZA EN MEDIO DEL CAOS
Manuel Pantigoso
I
El itinerario de Maritza Núñez (Lima, 1958) comprende cuatro libros escritos todos ellos en Finlandia donde ella reside desde hace muchos años, dedicada especialmente a la dirección coral. Esta ausencia del Perú explica, quizá, el poco conocimiento que se tiene, en nuestro medio, de su importante producción.
Su primer libro de poesía, Tierra de caramelo (1986, incluido dentro de Pentagramas ebrios, al lado de su madre, la prestigiosa Carmen Luz Bejarano) posee una rica musicalidad en el trazo colorido de sus versos. Ubicado dentro de la literatura infantil, aquí el niño encarna el embrión y el germen de la vida, símbolos estos que serán una constante en su obra poética futura. Posteriormente editará Calidoscopio op. I (1987), en donde el juego al mismo tiempo lúdico y macabro de la vida se hace presente junto con el humor y una cerada ironía y con los acordes musicales que acentúan cierto tramado de sonidos fúnebres. En Passio secularis (1988) Maritza perfila, por el lado del misticismo, un nuevo tono dentro de su ya maduro concierto poético. La figura de Judas le sirve para expresar, simbólicamente, la desintegración y la muerte. Por otro lado Cristo será el símbolo de la ascensión de la humanidad. En Jeux (texto publicado en 1990) predomina el humor negro y corrosivo que “puede ser representado como un monólogo”, a decir de la propia autora. Esta farsa poética se emparenta de alguna manera con el teatro del absurdo y es un puente que servirá para la escritura de su reciente libro.
II
A tres años del florecimiento de un nuevo milenio, observamos una tendencia muy marcada dentro de la poesía actual: la reproducción en imágenes de todo el desconcierto y el caos que provoca el incierto futuro de la humanidad, lo cual trae como consecuencia la inclusión de un sentido visionario con alta carga simbolista de la realidad (el legado de Nostradamus y Blake), el abundamiento de ciertas referencias místicas (Espíritu Santo, Génesis, Jerusalén, etc.) y la reelaboración de la llamada “originariedad” (basada en mitos y leyendas).
El libro Creatura de Maritza Núñez está inmerso dentro de esta dirección. Sus códigos poéticos poseen un halo profético y esperanzador, aun cuando la “desrealización” de las imágenes, con claras reminiscencias de las pinturas de Chirico y de Tanguy, sean, por momentos, caóticas y destructoras.
Efectivamente, en medio de las ruinas y del desastre se levanta esta “creatura”, este volver a ser, siempre creativo, que es la esperanza o el mito redivivo de la salvación. La autora pone, así, en sus versos un mensaje nuevo que proviene de un estado de zozobra (el antes y el después del caos) y, también, de la búsqueda de la palabra nueva. Pero no se trata de un poemario grave y solemne. Lo que predomina más bien es el tono desacralizador. Tal es el caso de los dioses y personajes bíblicos, enredados en una realidad minúscula y cotidiana: “El Hijo del Hombre con su corte de ángeles distraídos (...) Apaga la radio y perezoso se acuesta. Llora”; “Adán montado en un cocotero patina”; “Luzbel enciende el televisor”, etc.
Otro logro estilístico relevante es la sugerencia de tiempos diversos mediante sugerentes oposiciones: “La oruga afina sus estalactitas de acero”. Los textos evocan, además, un universo destruido, poblado de extraños seres y objetos fantásticos que se constituyen en algo así como la visión premonitoria de una edad que vendrá. Y a su lado se reproduce ese gran “orgasmo estelar” o esa explosión que como una luz ancestral está en la memoria de todos los hombres. ¿Explosión de la destrucción o explosión del amor? Ciertamente, la poeta–música o la música–poeta apuesta por el renacimiento permanente dentro de una atmósfera submarina donde el amor es brote y renovación a cada instante.
Desde el agua iniciática, desde el origen del amor y del a-mar se construirán el futuro y las nuevas utopías, como un “Mirífico acto de nacer innumerables veces”.
Pantigoso, Manuel . (1931). Poeta, crítico literario, maestro universitario. Doctor en Literatura y Filología, y Doctor en Educación. Miembro de Número de la Academia Peruana de la Lengua. Profesor Emérito de la UNMSM. Tiene publicados unos cuarenta libros.